
Una mujer embarazada con su ecografía como Marisa, que tuvo que hacerse montones de ecos en su embarazo.
De nuevo estamos por aquí para contaros una historia de una mamá que acudió por aquí angustiada en pleno embarazo. Esto nos contaba Marisa hace apenas unos meses:
Te escribo para contar el caso de mi hija Núria, ya que me ha servido de mucho leer casos de otras mamás y sus bebés. Hoy cumplo 29 semanas de embarazo y hasta la fecha me he encontrado bien y todo parecía normal hasta la eco de las 20 semanas. En la ecografía de hoy nos han dicho que la bebé está en percentil 4 y se nos ha caído el mundo encima. Ahora estoy muy triste y con miedo por lo que podría pasar. Me harán la siguiente eco en 15 días para ver como evoluciona y mientras, reposo y tranquilidad. Las arterias uterinas en mi caso están bien pero la bebé pesa 1.039.
Sé que he de ser positiva y no perder la esperanza, pero la verdad es que estoy acongojada. Espero que se resuelva todo bien y que la pequeña nazca sana y fuerte.
Marisa.
Pues bien, tengo que deciros que en su día y lo lamento muchísimo, no pude leer el mensaje de Marisa porque yo misma estaba pasando el final de mi segundo embarazo (ya os contaré mejor en otro post pero sí, soy mamá de nuevo 😊).
Así que en cuanto regresé a la normalidad y leí al fin su mensaje en el correo, me puse enseguida en contacto con ella para saber si todo había salido bien. Ella me ha autorizado para que os reproduzca con sus palabras cómo sigue su historia, después del parto:
Pues el caso fue que me fueron haciendo ecografías Doppler cada 15 días y Núria siguió en percentil 4 hasta que, el día que cumplí 40 semanas de embarazo me indujeron el parto. El parto fue bien y ella pesó 2,700 kgs y midió 46 cms. A fecha de hoy tiene 2 meses y medio y está preciosa y muy sana. En la revisión del mes ya estaba en percentil 10 y en la de los dos meses en percentil 25. Así que finalmente parece ser que algo sucedió en la circulación transplacentaria durante la gestación y la niña recibió menos alimento del que precisaba sin que ello la haya afectado en nada, según parece hasta la fecha.
Mi marido y yo lo pasamos fatal los últimos meses de embarazo y por fortuna todo ha salido bien. Como ya dije anteriormente, en un momento de tanto sufrimiento agradecí muchísimo poder leer casos similares al nuestro y por eso me decidí a escribir el mío.
Pues esta es la historia de Núria y Marisa, que por suerte leemos que está fenomenal. Mil gracias por dejarnos tu testimonio para otros papás que se encuentren en una situación similar.
Y si tú también quieres dejar por aquí tu historia, recuerda que puedes escribirme a bajopercentil@outlook.es.